El más reciente, ha sido el aparecido en Robella, Italia. Según los expertos, este sorprendente círculo parece ser el tercero de una serie de círculos que aparecieron por primera en junio de 2010, todos al norte de Italia. La estrella aparecida en junio de 2010 era de seis puntas, en junio de 2011 apareció una estrella de siete puntas, y ahora esta estrella tiene ocho puntas, que al parecer contienen un código binario oculto. ¿Es este un mensaje procedente de más allá las estrellas?
Cerca de Asti, a los pies de Robella (con poco más de 500 habitantes) apreció en la mañana del domingo un nuevo círculo en los cultivos. A primera vista, las dimensiones parecen irrelevantes, a no ser por su significado simbólico en los puntos dentro de un perímetro del triángulo. Rápidamente los expertos calcularon el código dentro de la estrella, que parece mostrar algunos elementos de la tabla periódica: Potasio, hidrógeno, deuterio y azufre. Esto ha dado paso a muchas preguntas como, ¿cuáles son las implicaciones de este código?
Uno de los elementos mostrados en este círculo es el hidrógeno, el “elemento más simple y más abundante del universo”. El hidrógeno es el combustible de las estrellas primas que se quema con el fin de crear energía, siendo una parte importante de la forma líquida manifestada de agua. El Deuterio es un isótopo del hidrógeno, también conocido como “hidrógeno pesado” y es abundante en los océanos de la Tierra. Se trata de un elemento clave en la energía nuclear, que también se cree que es esencial en la creación de energía. En mayo de 2009, algunos científicos afirmaron que una forma ultra-densa de deuterio seria “el combustible nuclear del futuro”, con una densidad que rivaliza con el núcleo del sol. Se cree que el deuterio es muy común en el planeta gigante Júpiter
Otro de los elementos representados es el azufre, el décimo elemento más frecuente en el universo, que se cree que se produce dentro de las estrellas y está presente en el interior de los meteoritos. En la Tierra, el azufre se encuentra cerca de las aguas termales y volcanes, y se cree que la luna volcánica de Júpiter contiene grandes cantidades de azufre, debido a su coloración. El azufre es un elemento común e importante de mercurio utilizado en la alquimia y se le dio el símbolo de un triángulo que descansa sobre una cruz. Este elemento ha sido ampliamente utilizado para tratar condiciones de la piel tales como la psoriasis y el eczema.
Y por último se encuentra representado el potasio, que en su estado estable se forma en una supernova y al parecer no se puede crear en la tierra ya que es demasiado volátil y “reacciona violentamente con el agua”, lo cual es interesante ya que está presente en casi todos los alimentos en el planeta. Otro punto a tener en cuenta, es que nuestro sistema nervioso necesita el potasio para funcionar. Según los expertos, el potasio es el octavo o noveno elemento más común en la masa de nuestros cuerpos.
Los ufólogos están trabajando intensamente para poder descifrar todo este galimatías, lo que parece comunicar algún tipo de mensaje con respecto a la creación de energía a través de un proceso potencialmente “alquímico” que involucra a nuestro planeta. Según las últimas investigaciones, las ocho puntas de la estrella parecen apuntar al “infinito”, que parecen mostrar una fuente infinita de energía. Lo que sí está claro son las palabras que parecen salir al considerar estos cuatro elementos: Abundante, Energía, Alquimia y Vital.
Pero ciertos investigadores van mucho más allá, ya que afirman que estos elementos están relacionados con el acelerador de partículas del CERN ubicado en Ginebra, ya que parece asemejarse al interior del propio CERN, una geometría octogonal y el círculo con esa misma forma. ¿Entonces qué quiere toda esta lección de química? Pues al parecer, se ha dejado la clave para un nuevo tipo de fusión energética, la ansiada energía libre. En resumen, el “choque” mediante el acelerador de partículas de deuterios que se forma a partir del hidrógeno almacenado por el potasio y con la clave del azufre. Si esto fuera así, estaríamos hablando del mayor descubrimiento de la historia, además de ser una prueba irrefutable de que los círculos en las cosechas contienen algún tipo de información simbólica enviado desde más allá de las estrellas. Aún queda por resolver las serie de triángulos en el círculo, que podría tratarse de una constelación de las estrellas. Pero por desgracia, aún hay muchas mentes muy escépticas, que se niegan a ver lo evidente, la existencia de vida inteligente en el exterior de nuestro planeta.
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