El año pasado ocurrió un terrible hecho que conmocionó al mundo entero, el 26 de mayo de 2012 un hombre llamado Rudy Eugene atacó indiscriminadamente a un vagabundo en el puente MacArthur de Miami. Eugene, que se encontraba completamente desnudo, “comió la cara” de su víctima como si se tratara de un Zombi. Este escabroso caso solo fue el inicio de una oleada de ataques a nivel mundial, donde las ...personas parecían tener el mismo comportamiento. Debido a la gran cantidad de ataques que se estaban registrando, las autoridades dijeron que se trataba de una nueva droga conocida como “sales de baño”.
Pero al igual que nuestras teorías sobre lo que estaba sucediendo (Apocalipsis Zombi, la realidad está superando a la ficción), recientemente un equipo de científicos hizo unas inquietantes declaraciones, afirmando que hasta el 40% de las personas están infectadas con parásitos cerebrales que tienen la capacidad de alterar el comportamiento humano. Joanne Webster, profesor de epidemiología en el Imperial College de Londres, explicó que muchos parásitos afectan directamente el cerebro, atacando al sistema inmunológico con acceso directo “para modificar el comportamiento del huésped”.
Uno de estos parásitos unicelulares es el llamado Toxoplasma gondii, que se encuentra en los gatos domésticos, y se estima que infecta a 350.000 personas al año solamente en Gran Bretaña. El profesor Jaroslav Flegr, profesor de biología evolutiva en la Universidad Charles en Praga, relacionó los comportamientos alterados, tales como la conducción temeraria, un mayor riesgo de suicidio o incluso brotes de violencia. Según los científicos del Imperial College, las ratas infectadas con el “Toxo”, mostraron un comportamiento violento ante los gatos. Y otra investigación de la Universidad de Stanford en California reveló uno cambios neuronales detrás de esta infestación.
El Toxo, que se presenta en forma de pequeños quistes unicelulares, se agrupan en dos áreas del cerebro: los que toman el control y el placer. Recientemente, los investigadores han demostrado que el ADN del Toxo incluye dos genes que estimulan la producción de dopamina. Los cerebros humanos tienen muchas similitudes con los de las ratas y ratones, lo que sugiere que el mayor número de accidentes de tráfico entre las personas con infección por toxoplasmosis puede ser debido a la perdida de las respuestas del miedo.
Pero los científicos que informaron de estos resultados alertaron que alrededor del 40% de la población están infectados con este parásito, pero es probable que esta cifra sea muy superior en otros lugares en todo el mundo. Otro estudio, publicado en la revista científica PLoS Patógenos, dirigido por el Dr. Barragán junto con investigadores de la Universidad de Uppsala, explicó que esto es un grave problema para la especie humana:
“Creemos que este conocimiento puede ser importante para la mejor comprensión de las interacciones complejas en algunos de los principales problemas de salud pública, que la ciencia moderna aún no ha sido capaz de explicar por completo. Al mismo tiempo, es importante hacer hincapié en que los seres humanos han vivido con este parásito durante muchos milenios. Hemos demostrado por primera vez cómo el parásito se comporta en el cuerpo de su huésped humano, y me refiero a la forma en que entra en el cerebro y manipula el huésped al hacerse cargo de uno de los neurotransmisores del cerebro.”
Nos encontramos ante un verdadero parásito apocalíptico, que se aloja en el cerebro y comienza a ejercer una influencia siniestra sobre nuestro comportamiento. Durante el último año hemos sido testigos de cómo muchas personas han tenido un comportamiento excesivamente agresivo, como si se trataran de zombis de ficción. Pero por desgracia, se trata de toda una realidad que nos ha sido ocultada, infectando a más del 40 por ciento de la población. Los conspiranoicos afirman que nos encontramos ante una “reprogramación zombi”, en un intento de causar el pánico y el caos, además de controlar a la población.
No hay comentarios:
Publicar un comentario