Una de las paradas obligadas que teneís que hacer el día que bajeís a la meseta, es sin duda, la iglesia de santa maría, en Wamba (Valladolid).
Forma parte de la ruta del románico de los Torozos.
El pueblo toma su nombre del rey godo, el cuál estuvo aquí enterrado junto a Recesvinto.
Forma parte de la ruta del románico de los Torozos.
El pueblo toma su nombre del rey godo, el cuál estuvo aquí enterrado junto a Recesvinto.
La iglesia como tal, conjuga los estilos mozárabe (cabecera) y románico (estructura).
En la villa se establecieron algunas granjas de reyes visigodos; también la Orden de San Juan fue propietaria de varias hectáreas de terreno alrededor del pueblo.
Pero sin duda alguna, el atractivo de Wamba está en el osario (siglo XII), ubicado dentro de la Iglesia de Santa María.
Contiene de manera bastante ordenada unas mil calaveras.
Y una leyenda que dice: Como te ves, yo me vi, como me ves, te verás. Todo acaba en esto aquí. Piénsalo y no pecarás.
Mandada construir por los reyes astur-leoneses en el siglo X para dar cobijo a los monjes mozarabes que huian de Al-Andalus.
Se trata de una construcción de piedra, alternando la mamposteria con sillares irregulares. El edificio que ha llegado hasta nosotros, tiene tres naves, con crucero no señalado en planta y tres capillas rectangulares en la cabecera. En su factura pueden apreciarse dos épocas distintas:
La cabecera y el crucero corresponden a un edificio de época mozárabe, del siglo X, muy compartimentados por medio de pilares sencillos, que soportan arcos de herradura. Originariamente se diseñó con planta de cruz griega. En esta parte se abren las capillas principales y los accesos a la sacristia y al claustro. En la capilla mayor hay restos de pinturas mozárabes, sobre cuyos origenes hay discrepancias.
El cuerpo de la iglesia es de estilo románico, que se corresponde con el momento en que los Caballeros hospitalarios de la orden de San Juan, establecierón su residencia. En esta época se levantarón el claustro, el cuerpo románico, el palacio y las dependencias anexas.
un lugar digno de ver
ResponderEliminarhace 7 años que lo fui a ver por segunda vez , y la verdad que es un lugar muy curioso de ver,fue un dia especial con gratos recuerdos
EliminarYo se de un chaval que fué con el cole.
ResponderEliminara la vuelta, uno de los profesores le descubrió un hueso en la mochila.. (le había mangado)
que bueno.
un saludo
Mª jesús