Pobladores de La Viña se sorprendieron el miércoles tras enterarse de que el popular "chupacabras" había asolado su localidad. "El chupacabras pasó por La Viña", señalaron en el lugar.
En la madrugada del martes, el predador que todavía no pudo ser identificado (creen que se trata de un felino) bajó de los cerros para devorarse ocho animales.
En la madrugada del martes, el predador que todavía no pudo ser identificado (creen que se trata de un felino) bajó de los cerros para devorarse ocho animales.
La localidad de La Viña es cabecera del departamento homónimo y se encuentra a unos 88 kilómetros de la capital salteña. Allí viven desde hace varios años los Tolaba, la familia a la que el chupacabras les arrebató su ganado. Los viñateros pronto se enteraron de lo ocurrido en otros lugares de la provincia y comenzaron a tomar los recaudos necesarios para cuidar sus animales.
Contó la dueña del ganado que cuando se levantó temprano, el miércoles, se encontró con ocho de sus animales sin vida, cuatro cabras y cuatro chivitos. Desesperada y sin saber qué había pasado, alertó a la policía local. Como viene sucediendo con casos de este tipo, las marcas y heridas de los animales muertos son similares y en el mismo lugar.
De inmediato en el pueblo comenzaron las deliberaciones de lo que podría haber ocasionado la matanza. ¿Qué es el chupacabras?, fue la pregunta dominante en el universo de interrogaciones de los viñateros. ¿Es un ucumar, un puma o un yaguar? Y hasta surgió la mitológica idea de que podría tratarse de, "por qué no" dijeron algunos, un uturunco.
La única certeza que hay hasta el momento en este tipo de situaciones es que algo o alguien mató a ocho animales en La Viña. Salvando el número de muertes, lo mismo ocurrió en Coronel Cornejo, donde encontraron cerca de 40 cabras sin vida, y en la localidad de Palomitas aparecieron quince.
Lugareños y gente que conoce como la palma de su mano donde vive, aseguran que los distintos hechos que se producen en la zona se deben a la quema de pastizales en los cerros.
"Cuando esto sucede, por lo general los felinos que deambulan lejos de la localidad, en los cerros, deciden bajar y al pasar por el primer paraje lo primero que hacen es atacar el ganado que está a su alcance", contó Aldo, un lugareño.
Una teoría de tantas que la gente del norte conoce y se encarga de difundir. Sin embargo, hasta el momento ni la misma Policía pudo identificar el o los seres vivos que atacan. Sin saber a ciencia cierta de lo que se trata, hay que seguir señalando que el chupacabras apareció de nuevo, esta vez en La Viña.
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