Sillas moviéndose por sí solas, golpes inexplicables en las paredes,
misteriosas gotas de agua cayendo desde el techo, los objetos desparecen
durante días para volver a aparecer de nuevo en el mismo lugar. Estos
son algunos de los síntomas clásicos de un inquietante
poltergeist. Según la descripción original, un poltergeist se refiere a
fenómenos normalmente acreditados a los espíritus o fantasmas traviesos
que se caracterizan por la psicokinesis u otras manifestaciones
físicas. Aunque en otras ocasiones los poltergeist se han llegado a asociar con el propio diablo, incidentes inexplicables que han hecho peligrar la vida de todos aquellos que fueron testigos.
Desde el comienzo de la historia se conocen gran cantidad de casos que han sido asociados con los fenómenos poltergeist, pero la realidad es que muy pocos han llegado a ser documentados. Uno de los más importantes y desconocidos casos por los amantes a lo paranormal es un clásico poltergeist danés de 1826. El incidente llegó a ser tan popular en Dinamarca que llevó a la expresión popular, “El diablo anda suelto por la calle Salmón”, que significa algo así como “estar en un verdadero apuro”. En la actualidad esta expresión se continúa utilizando, pero de una forma más nostálgica. Muchas personas no conocen realmente el origen de la expresión, pero en muchas ocasiones la realidad supera a la ficción.
Una noche de septiembre de 1826, una casa ubicada en Laksegade 15 (Calle Salmón), en el centro de Copenhague, se convirtió en el origen del mal. De repente, todos los residentes del edificio huyeron presos del pánico a la calle, desde donde podían observar como sus casa se convertían en un estado de caos total. Rápidamente la noticia se propagó por toda la ciudad, lo que hizo que muchas personas se dirigieran a la Calle Laksegade para ver lo que estaba ocurriendo. Los testigos describieron como las ventanas se rompían y como los objetos salían volando por el aire, como si fueran lanzados por una enorme fuerza invisible.
Aunque lo más extraño estaba por ocurrir. Durante el posterior interrogatorio a los testigos presenciales, una mujer de edad avanzada que residía en el edificio, dijo a las autoridades que creía que ella era la causante del terrible incidente, ya que provocó a los malos espíritus mientras consultaba el Cipriano (El Cipriano es un grimorio oculto que se creía que estaba escrito en sangre).
Después de un tiempo, la gente empezó a creer que el incidente en Laksegade fue simplemente una broma por un grupo de jóvenes. Otra teoría popular es que el evento había sido organizado por un criador de pollos, como venganza a una familia que residía allí y que había tratado injustamente a su hija. En cuanto a lo que realmente sucedió, nunca se llegó a resolver. De hecho, hay varias historias contradictorias y detalles que hacen este inusual evento aún más misterioso. Por ejemplo, no hay una fecha oficial para el evento en ninguno de los documentos oficiales de la época, pero un informe de la policía con fecha del 15 de septiembre de 1826 decía lo siguiente:
En cualquier caso, algo sin explicación sucedió en la calle Laksegade en 1826, pero ¿qué fue lo que causó el pánico social? Los ancianos que residen cerca de la calle Salomón lo tienen claro, el Diablo hizo acto de presencia en Dinamarca.
http://www.mundoesotericoparanormal.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario